Hace sólo un mes Dallys Ferreira vivió el peor momento de su vida. Su hermano Jonathan, de 20 años, se suicidó en Paraguay, tras una discusión con su mamá.
"Siempre buscamos la lógica y no hubo lógica en la muerte de Jonathan. El resultado es tan trágico y fue un impulso... Uno se siente muy responsable. No fue fácil y no es fácil no estar enojada. Soy muy de castigarme a mí misma, me enojé conmigo porque no estaba ahí".
La actriz, que estaba en Mar del Plata protagonizando Sé infiel sin mirar con quién, se enteró vía telefónica de la tragedia, entró en shock y viajó lo más rápido que pudo a Ciudad del Este, para acompañar a su madre y su hermano Brian, de 13 años.
Ya más recuperada, Dallys decidió traerse a su familia a Mar del Plata y en la tarde del viernes habló con El diario de Mariana: "Estoy mejor. Las personas que han pasado por esta situación saben que es algo nos va a acompañar toda la vida, pero todos los días elijo pelearla. Yo tomé la decisión de qué quiero para mí y para mi familia y el futuro que quiero".
"Busco motivos para sonreir, a pesar del dolor. Lo más grande que hay es el amor inmenso que tenemos por Jonathan y tenemos hermosos recuerdos", relató la actriz.
Además, profundizó: "Hay muchísimas preguntas que nos hacemos. Los últimos meses de Jonatan fueron hermosos, estaba concretando muchas cosas. Arrancó con la facultad, entró a una facultad privada, tenía muy buenas notas. Por otro lado, se había contactado con el padre hace dos años. Siempre buscamos la lógica y no hubo lógica. El resultado es tan trágico y fue un impulso. Uno se siente muy responsable. Ahora vemos textos y cosas que él decía y uno empieza a analizar... No fue fácil y no es fácil no estar enojada. Soy muy de castigarme a mí misma, me enojé conmigo porque no estaba ahí. Por qué no vinieron mi mamá y Brian a Mar del Plata y entonces no hubieran discutido...".
Para finalizar, Dallys agregó: "No quiero llevar mi tristeza a todos lados. Por ahí me encierro en el camarín, me quiebro un poco ahí cuando salgo fuerzo un poco la sonrisa, pero sin darme cuenta me estoy riendo yo".
Ya con más fuerzas, con los recuerdos de los lindos momentos vividos y con la sonrisa asomando en su cara, Dallys Ferreira continúa con su vida.