Uno de los triángulos más interesantes de Mis amigos de siempre comienza a tomar cuerpo con la relación de Nicolás Cabré con Calu Rivero.
Su personaje de Simón se separó de Rocío (Cherri), pero la decisión no está firme: él sigue sintiendo celos y ella –que se quedó con la hija de ambos- está dolida por la distancia.
Mientras esta pareja transita el difícil momento, Tania (Rivero) se acerca cada vez más y lo intenta seducir. En este marco se dará un reencuentro fogoso entre Rocío y Simón y en el medio llamará Tania, que entenderá inmediatamente lo que sucede al otro lado del teléfono.
Los lazos pasionales están en marcha.