"Estamos en una crisis y no se lo que va a pasar. Probablemente sea definitivo pero no lo puedo decir".
En uno de los mejores momentos de su carrera profesional, María Eugenia Ritó (38) había optado por tomar distancia de los medios a pedido de su pareja y, por sobre todo, para convertirse en mamá. Pero las cosas no salieron como lo planeó. Su último trabajo fue en Bailando 2012, y cuando apostaba a consolidar su familia, atraviesa una profunda crisis matrimonial con el abogado Marcelo Salinas (47).
"Desde febrero que no estoy con Marcelo. Había formado una familia, es una persona que amo aunque no estemos juntos. Son 13 años y pensé que era para toda la vida. Estamos en una crisis y no se lo que va a pasar. Probablemente sea definitivo, pero no lo puedo decir. No lo sé. Un matrimonio es un 50 por ciento de ambas partes", confesó ante Daniel Ambrosino, en el ciclo radial La Tapa. "Es muy difícil para los dos. Para la familia. Para mí. Ojalá se arregle todo en los mejores términos", se esperanzó.
"Antes de volver a los medios tengo que hacerme una estética por una cicatriz. Además me quiero achicar las lolas. Ya se amortizaron estas, no se usan más".
Tentada para volver al teatro por varias compañías, María Eugenia puso condiciones: "Antes de todo tengo que hacerme una estética por una cicatriz. Además me quiero achicar las lolas. Ya se amortizaron estas, no se usan más. Es una cuestión estética como todas las mujeres", bromeó como para darse ánimo. Aunque luego recordó cómo fue que ShowMatch fue su último trabajo artístico: "Decidí alejarme del medio por un año porque Marcelo me lo pedía. Y Justo atravesamos esta crisis", lamentó Ritó.
Al cerrar, la bailarina reveló que evita las entrevistas para no hablar de su compleja actualidad sentimental, y reflexionó “No veníamos tan bien con él y sufrí un bajón. Tenía mucha tristeza. Pero ya es hora de retomar mi carrera. Me costó mucho y quiero volver".