"En el aeropuerto por suerte les saqué una foto, que al final fue la última. Estaba agotada porque no había dormido y Maxi quería que fuéramos a dormir la siesta. Me dijo 'dale, gorda, tenés tres meses para verlos', pero no quise. Tomamos mates, después les hice unas pastas al pesto y lo llevé a descansar. Nunca más se despertó de la siesta".
La emoción se mezcló con el dolor y Wanda Nara no pudo contener las lágrimas al contar, detalladamente y por primera vez, el doloroso momento que vivió el 27 de septiembre pasado, cuando su abuelo Cacho falleció en su casa de Génova, a sus 83 años.
Aquella mañana, la modelo había recibido por primera vez en Italia la visita de sus abuelos maternos. Wanda y Maxi López los fueron a buscar al aeropuerto y los llevaron a su casa. Los padres de su mamá habían viajado para conocer a Benedicto (que en ese momento tenía un año), el más pequeño de la familia. Sin embargo, Cacho falleció mientras dormía la siesta en la casa de los López-Nara.
Nueve meses después, Wanda contó en Infama cómo vivió ese duro momento y rompió en llanto: "Fue tremendo. Yo planeé ese viaje con mi abuelo durante tres meses. No fue para nada fácil. Armamos todo y esa noche que ellos viajaron yo no dormí, pensando en que capaz se perdían en la escala, estaba nerviosa. Antes de que viajen, incluso, tuvimos la precaución que se hagan chequeos médicos y estaba todo bien. Después me enteré que había hecho un montón de despedidas en Argentina con sus amigos".
La modelo continuó su relato: "Mis abuelos se iban a quedar casi tres meses en Italia. Cuando los fui a buscar al aeropuerto, por suerte les saqué una foto, que al final fue la última. Yo estaba agotada porque no había dormido y Maxi quería que fuéramos a dormir la siesta, que es muy habitual en los jugadores de fútbol. Yo no quería y él me dijo 'dale, gorda, tenés tres meses para verlos'. El se fue a dormir y yo me quedé con ellos. Primero tomamos unos mates, después les hice unas pastas al pesto y al terminar de comer lo llevé a descansar y nunca más se despertó de la siesta".
"Cuando lo fui a despertar, fue lo peor que viví en esta vida. Fue horrible toda la situación. Valentino gritaba desde la planta baja 'abrime que quiero ver al abuelo' y lo peor fue que mi abuela también estaba abajo y le tenía que ir a explicar lo que había pasado".
Antes del momento más díficil, Wanda había ido a buscar a sus hijos (Valentino, Constantino y Benedicto) al jardín: "Valentino quería ver al abuelo, yo le venía diciendo hace un montón que iba a venir él. Entonces, cuando llegamos, lo voy a despertar y fue lo peor que viví en esta vida. Fue horrible toda la situación. Valentino gritaba desde la planta baja 'abrime que quiero ver al abuelo' y lo peor fue que mi abuela también estaba abajo y yo le tenía que ir a explicar lo que había pasado".
La modelo también reflexionó sobre esas últimas horas con su abuelo, muy emocionada: "A veces le digo a Maxi 'menos mal que tuve ese almuerzo los tres solos'. Yo le decía a mi abuelo que quería volver a Argentina y él me repetía que me quedara un poco más, que aguantara. Yo le decía que convenza a Maxi de que vuelva a River, mi abuelo era el único de River de la familia. Pero él lo último que me dijo fue que aguante un poco más, que todavía no era el momento de volver".
Mirá el video con la emoción de Wanda Nara al recordar a su abuelo.