El doloroso fin de la relación entre Luciana Salazar y Martín Redrado tuvo un impacto directo en la salud de la modelo, que confesó en la entrevista a la revista Gente que pesa, apenas, 41 kilos.
En medio del escándalo, comenzó a correr el rumor de que Luli había sido internada en una clínica por una descompensación. Sin embargo, la propia Salazar fue la encargada de desmentir la información a través de su cuenta oficial de Twitter.
“Quiero aclarar que no estuve internada, fui a la Trinidad con un cuadro de gastritis y me hicieron los análisis y me pusieron suero para no deshidratarme”, escribió la joven, en su perfil de la red social.